Una fusión entre operadores en Holanda, deja la puerta abierta al resto de países para reducir el mercado de cuatro a tres grandes operadores.
La Comisión Europea ha aprobado sin condiciones destacadas la fusión en Holanda entre Tele2 y Deustsche Telekom. Una operación importante ya que muestra un giro radical en Europa, un organismo que históricamente se había mostrado contraria a permitir operaciones corporativas que implicaran una reducción de cuatro a tres operadores por país.
Ahora se limita a indicar si la operación plantea problemas para la competencia, en lo que se puede considerar una ayuda para que los operadores puedan fusionarse de cara al futuro despliegue del 5G. La noticia ha sido bien recibida en Telefónica, ya que la compañía quiere prescindir de su marca O2 en Reino Unido para reducir su deuda de grupo y con motivo del Brexit.
De esta forma la venta sería clave para que Telefónica baje su elevado endeudamiento y le bastaría con desinvertir un 40% de O2 que implicaría una inyección de fondos de entre 3.000 y 4.000 millones de euros. En cualquier caso la decisión final es de Telefónica sabiendo que la Comisión Europea deja las puertas abiertas desde ahora a fusiones dentro de distintos mercados.
