Pedro Serrahima indica que es injusto cómo le trata la CNMC.
El máximo responsable de O2, el nuevo operador de bajo coste de Movistar, considera injusto el trato que reciben por parte de la Comisión Nacional de Mercados de la Competencia según indican desde El Confidencial: ‘Estamos obligados a revender la fibra al resto de operadores a un precio regulado de 17,57 euros al mes. El problema es que ya hay operadores que están ofreciendo precios más baratos, incluso sobre nuestra propia red, pero nosotros no podemos igualarlos. Nos siguen considerando un monopolio cuando ya no lo somos. Es una situación completamente injusta’.
La regulación obliga a O2 a ofrecer dos precios.
El nuevo operador ha tenido que ofrecer dos precios, uno de 45 euros para 66 municipios con oferta competitiva y otro de 58 euros para el resto. O2 indica que si ponen 58 euros en todas las ciudades se les acusaría por elevado precio, pero tampoco ‘les dejan’ poner 45 euros en todo el territorio, por lo que el cliente final es el que pierde al no poder obtener el precio más bajo.
Pedro Serrahima indica que esta situación injusta perjudica a O2: ‘Las zonas de competencia y no competencia no se han tocado en dos años y hay ciudades donde ya hay competencia‘. Además desde O2 aclaran, que por eso tienen que explicar el motivo de la diferencia de esos precios, considerando que es un regalo para el resto de competidores.
La CNMC opina diferente, según hemos podido saber desde CuartaCobertura.
La CNMC niega que Movistar tenga que pagar un precio fijo más elevado en unas partes de España por su culpa, como ocurre con su nueva marca O2, indicando que la compañía es libre de fijar sus precios y si quiere puede bajar la oferta mayorista, de 17,57 euros al mes, para ofrecer la misma oferta minorista en todo el país.
La diferencia es, según indica la CNMC, que en zonas no competitivas Telefónica tiene que ofrecer el servicio mayorista de NEBA y la regulación indica que tiene que existir un margen suficiente entre los precios mayoristas y minoristas. Esto significa que contrariamente a lo que O2 intenta interpretar, no es la CNMC quien obliga a ofrecer precios más altos a los clientes de zonas no competitivas.
Por lo que vemos, sería necesario que Movistar bajase su precio mayorista para poder ofrecer el mismo precio con O2 en todas las ciudades. Una decisión que supondría perder varios millones de euros al año en las cuentas de Telefónica, que parece optar por el camino de enmedio: no bajo el precio mayorista y critico a la CNMC por no dejarme unificar mis precios minoristas.
