Nuestro top lo forman el Nokia N-Gage, Motorola Rokr E1, Nokia 7280, Blackberry Storm, Microsoft Kin One, HTC First y el Amazon Fire Phone.
Los terminales móviles evolucionan de forma sorprendente cada año, pero este camino de evolución no siempre supone llegar al éxito. En la siguiente entrada mostramos algunos terminales que pudieron ser un éxito en su tiempo pero fueron un gradioso fracaso por diversos motivos. Podemos decir que estamos ante los siete casos más llamativos de fracasos móviles de la historia.
Pero antes de entrar en contexto, ponemos la mirada en 2007 cuando Apple presenta su primer iPhone indicando que un dispositivo móvil tiene que tener pantalla táctil y ser útil, además de poder ejecutar aplicaciones que dieran más funciones al terminal. A partir de aquí, la suerte no ha estado con todos los modelos de la competencia o tal vez no era el momento de lanzarlos.
1) Nokia N-Gage, demasiado pronto para tener un teléfono en forma de videoconsola portátil.
Fue en 2003 cuando la éxitosa Nokia por aquel entonces decide crear un potente dispositivo con videojuegos en su interior. La realidad es que su diseño no estaba bien pensado, al menos ni el conjunto de sus botones ni la disposición de la pantalla, lo que provocaba que el teléfono fuera extraño de utilizar tanto para jugar como para realizar llamadas al tener su altavoz en un lateral.
Poco después Nokia presentó la Nokia N-Gage QD, mejor pensada al ser más pequeña y tener mejor diseño. Pero igualmente fue un fracaso y hasta la fecha ningún fabricante ha podido conseguir un terminal que sea videoconsola portátil a la vez de forma exitosa.
2) Motorola Rokr E1, un fracaso que utilizaba iTunes.
Fue en 2005 cuando Motorola presentó un terminal que tenía como protagonista a Apple. Este terminal tenía iTunes integrado, pero su fracaso es más que evidente si tenemos en cuenta que por esa fecha Apple patentó y lanzo el iPod Nano, que podía guardar más de mil canciones mientras que el Motorola apenas contenía espacio para almacenar cien canciones.
3) El Nokia 7280, más conocido como el teléfono con forma de barra de labios.
De nuevo en 2005, Nokia quiso sorprender con un diseño que era cuanto menos llamativo pero cuya funcionalidad era nula. La empresa no paraba de lanzar productos llamativos sin tener en cuenta lo que realmente necesitaba el cliente, que era un Smartphone. El Nokia 7280 era complejo de utilizar y sus botones bastante incómodos. Para eliminar la botonera tradicional Nokia creó un dial con una reducidas numeraciones que hacían complicado marcar un número o escribir un SMS.
4) La Blackberry Storm nunca supo adaptarse a la pantalla táctil.
Esta Blackberry lanzada en 2008 pretendía competir con el teléfono de Apple y para ello cambiaron el teclado querty por la pantalla táctil. Pero su experiencia de uso era bastante deficiente al no tener un sistema operativo preparado para competir con Apple.
5) Microsoft Kin One, el teléfono social que se olvidó de todas las aplicaciones.
Su lanzamiento data de 2010 y fue el fracaso más sonado de Microsoft. La marca necesitaba conquistar una parte del mercado con un sistema operativo diferente, pero no lo consiguió y este terminal apenas fue conocido en el mercado. Era un modelo sencillo para trabajar con Twitter y Facebook olvidándose del resto de aplicaciones, un gran error.
6) HTC First, otro intento de redes sociales por parte de Facebook.
Tres años despúes del intento de Microsoft, Facebook también lo intento con el HTC First. Este terminal colocaba las actualizaciones de estado de la red social en la pantalla principal y la de bloqueo y también introducía los chats en burbujas flotantes al estilo de Facebook Messenger. No era para nada llamativo y apenas se vendió al tratarse de un terminal mediocre en comparación con otros terminales de Android que ya se ofrecían por ese momento.
7) Amazon Fire Phone, un intento de convertir el éxito del Kindle en un Smartphone.
Amazon también lo intentó en 2014 con el precio como principal reclamo. El Amazon Fire contaba con un sistema operativo propio creado sobre Android. Lo más interesante era ciertas funcionalidades como el seguimiento de nuestro rostro basado en cuatro cámaras frontales, el reconocimiento de elementos de la vida real para asociarlo a compras e incluso una interfaz 3D adelantada a su época.
El producto era bueno pero sus ventas fracasaron ya que no supo venderse como algo novedoso en esa época. Tal vez Amazon pensó que el marketing se realizaría sin invertir mucho dinero como sucedió con los Kindle, pero la diferencia es que en el segmento de los Smartphone ya existían muchos competidores luchando para conseguir su particular cuota de mercado.