La mayor parte de las cabinas no son rentables, pero el Gobierno ha preferido realizar un análisis más completo sobre la retirada de las mismas.
Contra todo pronóstico, las cabinas no desaparecerán de las calles con el nuevo año después de que el Gobierno decidiera rectificar su postura y exigir que sigan formando parte de las prestaciones incluidas dentro del servicio universal de telecomunicaciones. El real decreto que se aprobará mañana viernes, si elimina la obligación de emitir guías telefónicas y el servicio de consulta de números de abonados. Pero por ahora las cabinas seguirán estando presente en nuestras calles.
La decisión de última hora del Gobierno se debe a que han preferido realizar un análisis más completo sobre el modo en que se podrán ir retirando las prestaciones del servicio universal de telefonía. En la actualidad se calcula que existen cerca de 18.000 cabinas y de ellas 12.000 no son rentables y unas 9.000 no cursa ni una sola llamada. Al ser un servicio no rentable, ningún operador optará a dar este servicio y por tanto Telefónica estará obligada a seguir ofreciéndolo.