Los servidores ahora son propios y se comparten entre usuarios del propio país, evitando que los picos de actividad afecten a todos los usuarios.
WhatsApp superó el reto de cambiar de año sin caerse. Cada fin de año millones de españoles utilizan esta aplicación para felicitar el nuevo año a sus familiares y amigos. El histórico de años anteriores muestra como WhatsApp se cayó durante unas horas. La primera caída se producía cuando sonaban los relojes en la India, unas horas antes de que llegase el turno de Europa y África.
Al parecer ahora el servicio ha mejorado su factor técnico y geográfico. Esto se explica si tenemos en cuenta que WhatsApp está equipado para funcionar sobre un tráfico máximo. Por eso justo cuando 200 millones de personas en la India se felicitaban el año, todo quedaba bloqueado.
Es cierto que el mundo va entrando en el nuevo año en diferentes horarios, lo que debería escalonar la saturación. Pero al aluvión de mensajes enviados en la India se suman otros 500 millones de Europa junto con unos 300 usuarios de África, todos celebrando el cambio de año a la vez, lo que provoca un segundo pico de actividad y una segunda caída de la aplicación a nivel mundial.
Ahora WhatsApp utiliza sus propios servidores, dejando a un lado los de IBM, y los ubica en muchos casos dentro de cada país (en España existe uno en Madrid) para que cada uno de ellos pueda soportar el pico de actividad sin afectar en su caso al resto de usuarios de WhatsApp en el mundo.